Plan de medición
Se trata del conjunto de especificaciones que deben cumplir las herramientas utilizadas en el proceso de evaluación (test, cuestionarios, encuestas, etc.).
Antes de establecer el plan de medición, hay que determinar los criterios de calificación y el tipo de certificación del curso online:
CRITERIOS DE CALIFICACIÓN | TIPO DE CERTIFICACIÓN |
– Códigos de valoración: por ejemplo, 0-4: insuficiente; 5: suficiente; 6: bien; 7-8: notable y 9-10: sobresaliente. – Actividades y/o módulos obligatorios. – Ponderación de notas por porcentajes a: examen individual, participación en foros, trabajo en equipo, pruebas y autoevaluaciones extra, etc. | – Título o Certificado oficial. – Diploma de participación o de aprovechamiento del curso. |
El plan de medición, sirve para dotar a la acción formativa de criterios de calificación y certificación del aprendizaje, mediante el empleo de herramientas fiables.
Fases para desarrollar un plan de medición
1. Seleccionar los tipos de mediciones:
a) Determinar qué medir según los objetivos fijados, los cuales pueden medir habilidades, conocimiento o actitudes.
b) Determinar si las medidas se adoptarán tomando una referencia normativa o criterial.
Una referencia normativa, evalúa las características del alumnado comparándolo con el total de la población. Ejemplo: nivel de lectura de los adultos en general.
Una referencia criterial, evalúa las características del alumnado comparándolo con un estándar. Ejemplo: nivel de lectura de un conjunto de individuos elegidos del total de participantes de un curso.
c) Determinar si las medidas serán cuantitativas, cualitativas o mixtas:
Mediciones cuantitativas:
– Correlaciones: establecen relaciones entre dos variables. Su resultado es un número entre – 1 y + 1, de modo que las correlaciones que se más se aproximan a 1, son el mejor ítem del test.
– Índices de dificultad: siguiendo con el rango de valores entre -1 y +1, una pregunta se considera significativa al ofrecer una correlación a partir de 0,8 (no se deben admitir cuestiones puntuadas por debajo de 0,5). Una pregunta que todo el alumnado responda bien o por el contrario mal, es poco significativa y debe reescribirse.
– Análisis de ítem: sirve para valorar si los ítem individuales y de la prueba completa son válidos. Este análisis requiere de dos variables independientes que se puedan comparar para determinar como de buenas son las preguntas del test.
– Test de significatividad: se realizan para determinar si los resultados obtenidos de un grupo de muestra, son característicos en comparación con el total de la población del que se ha extraído dicho grupo.
Mediciones cualitativas:
– Análisis de distracción: se trata de localizar una cuestión que reciba una correlación baja, positiva o negativa utilizando métodos cuantitativos y determinar si hay una distracción particular (respuesta posible) que alejaron a los alumnos de la respuesta correcta. Una vez detectada, se reescribe la cuestión y se somete nuevamente a análisis.
– Cálculos de frecuencia: obtención de datos a partir de un paquete estadístico, sobre todo cuando se tiene que analizar un gran número de casos.
d)Determinar si se aplicarán las medidas antes o después de usar nuestra solución.
2. Desarrollar los instrumentos de medición:
En el momento en el que se hayan seleccionado los tipos de medición, se confeccionarán los diferentes instrumentos de medición.
Son instrumentos de medición de la formación online:
– Ejercicios para unir con flechas.
– Test de opción múltiple.
– Test de verdadero – falso.
– Cuestiones de complemento (repuesta corta).
– Simulaciones, etc.
3. Calcular la longitud de cada instrumento:
Hay que calcular dos aspectos relativos a la longitud de cada instrumento:
– Número de cuestiones: se recomienda realizar varias preguntas por objetivo, para que el alumnado pueda demostrar los conocimientos y habilidades adquiridos.
– Tiempo de respuesta: hay que considerar el tiempo requerido para leer las instrucciones de realización del ejercicio y otros aspectos relativos a las preguntas (tipo, extensión, complejidad, etc.).
4. Calcular el peso de cada ítem:
Determinar la importancia de cada parte del curso online, para repartir el número de objetivos y preguntas a realizar sobre los mismos.
Por ejemplo, para una parte de un curso que dura 2 horas, hay 6 objetivos sobre cada uno de los cuales se quieren hacer 2 preguntas. Por tanto, se deben realizar 12 preguntas.
5. Decidir cuándo aplicar cada instrumento:
Determinar si solo se realizará un test al finalizar el curso o varios durante el desarrollo del mismo. En el caso de intercalar varios test a lo largo del curso, hay que determinar cada cuanto se hará.
6. Recoger y analizar los datos:
Es importante planear bien cómo se llevará a cabo el procedimiento de evaluación, ya que los datos son recuperables en cualquier momento porque quedan registrados, pero otros aspectos no lo son y supone una inversión de tiempo y dinero tener que volver a planificar todo el proceso.
Los instrumentos de la evaluación formativa
Son elementos que constituyen una ayuda para obtener datos e informaciones sobre el alumnado. Los principales instrumentos de evaluación utilizados en la formación online son:
1. Prueba objetiva:
Permite la calificación automática, pudiendo establecerse un banco de datos de este tipo de pruebas.
2. Preguntas intercaladas:
Serie de preguntas que se realizan a lo largo del desarrollo de los módulos.
3. Pruebas adaptativas y pruebas autoadaptadas:
Las pruebas adaptativas, son pruebas individuales realizadas por ordenador, según el nivel de conocimiento y habilidad alcanzada.
Las pruebas autoadaptadas, son pruebas individuales realizadas por ordenador, donde el alumnado elige el nivel de dificultad de las preguntas planteadas.
4. Mapa conceptual:
Se trata del desarrollo de mapas de conceptos por parte del alumnado utilizando el ordenador.
5. E-portfolios:
Se conocen como “cuadernos de trabajo”, tratándose de documentos en los que se recogen las pruebas desarrolladas a lo largo del proceso de aprendizaje.
Desde el punto de vista evaluativo sirven para medir y monitorizar los aspectos del aprendizaje a través de pruebas escritas, de modo que el alumnado es consciente de los logros y dificultades que se le presentaron a lo largo del proceso. Son muy útiles para llevar a cabo la autoevaluación, la coevaluación y la heteroevaluación.
6. Rúbricas:
Sirven para gestionar y sistematizar el proceso evaluativo y facilitan la descripción de los criterios a seguir para valorar el trabajo realizado. Se utilizan para valorar distintos tipos de productos, competencias y habilidades adquiridas por el alumnado:
– Proyectos.
– Presentaciones digitales.
– Trabajos grupales etc.
En todos los casos se proporcionan indicadores que permiten documentar el progreso del alumnado. Contiene elementos a evaluar, de los cuales se realiza una descripción de diferentes niveles. Permiten valorar las competencias y habilidades adquiridas por el alumnado de forma precisa.
7. Foros:
Fomentan el trabajo colaborativo a través de la proposición de debates, consenso de ideas, etc. La ventaja principal de esta herramienta, es que el alumnado puede trabajar de forma asincrónica, es decir, este puede aportar sus ideas sin necesidad de coincidencia con el resto. Dan lugar a la reflexión, deliberación y adopción de posturas.
El personal docente debe llevar a cabo un seguimiento de las intervenciones del alumnado para orientarle durante el proceso. Se considerarán instrumentos de evaluación cuando:
– Faciliten la interactividad.
– Propicien la resolución de problemas.
– Den lugar a la participación de todo el alumnado.
– Permita al alumnado compartir ideas, analizar opiniones y reflexiones.
Todo lo anterior son aspectos clave para llevar a cabo la construcción del aprendizaje.
8. Listas de control:
Listas de categorías prefijadas que sirven para registrar la presencia o ausencia de conductas que requieran baja inferencia.
La inferencia es un proceso a través del cual se extraen conclusiones a partir de varias premisas. Se recomiendan cuando se desea obtener información sobre actividades, conductas manifiestas e indicadores.
El inconveniente principal de las mismas es que solo permiten registrar la presencia o ausencia de la característica observada, sin que exista la posibilidad de registrar comentarios sobre la conducta, el grado o las razones de dicha ausencia o presencia.
9. Presentación o exposición a través de videoconferencias:
Permiten que el alumnado lleve a cabo exposiciones orales, lo que permite valorar características no observables, aclarar discrepancias, etc.
Sirven para aportar profundidad y precisión sobre la perspectiva del alumnado. Se recomienda elaborar una guía y un soporte para registrar las valoraciones observadas al emplear esta herramienta, para de este modo facilitar dicho registro.
10. Registros anecdóticos:
Se emplean para recoger conductas relevantes o temas de interés. Dichas conductas o temas de interés se describen de forma detallada, para detectar los cambios que se produzcan en cada participante de la acción formativa.
Antes de realizar cualquier juicio sobre un alumno, se debe disponer de varios registros del mismo. Es importante registrar la secuencia del comportamiento, el contexto en el que se realiza y emplear un lenguaje directo y fácil de comprender tanto para el personal docente como para el alumnado.
11. Diarios de clases:
Se trata de registros periódicos sobre la conducta del alumnado, que pueden construirse a partir de diversas consignas y adquirir distintos formatos.