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Políticas Internacionales de Seguridad Vial 2021-2030: Recomendaciones del Profesor de Autoescuela

Para reducir la accidentalidad se desarrollan políticas en materia de seguridad vial. Hasta el año 2020 estuvo vigente la Estrategia de Seguridad Vial 2011-2020 y actualmente la vigente es la (a) Estrategia de Seguridad Vial 2021-2030. (a) Se han tenido en cuenta las estrategias de seguridad vial de los organismos internacionales a los cuales pertenece España, respecto a las cuales existe un compromiso de adhesión:

Organización de las Naciones Unidas (ONU): ha propuesto la formulación y ejecución de estrategias y programas de seguridad vial sostenibles y la proclamación del periodo 2021-2030 como Segundo Decenio de Acción para la Seguridad Vial, con el objetivo de reducir en un 50% las muertes y lesiones graves por accidente.
Unión Europea (UE): ha propuesto continuar los esfuerzos en la mejora de la Seguridad Vial realizados durante la década 2011-2020.
Otros organismos: estrategias y propuestas de seguridad vial realizadas por otros organismos internacionales, públicos o privados. Banco Mundial, a través de su iniciativa GRA (Global Roadmap of Action), OCDE/ITF/IRTAD, ETSC, ERSO, FERSI, FIA, etc.

Los aspectos clave sobre los que se hace hincapié en la Estrategia de Seguridad Vial 2021-2030 son la (a) “Visión Cero”, los (b) “Cinco Principios del Sistema Seguro” y los (c) “Cinco Pilares” de la OMS”.

(a) Se pretende llegar a un nivel de “cero víctimas” por accidente de tráfico.

(b) 1. El ser humano comete errores que pueden provocar accidentes. Sin embargo, nadie debe morir o ser gravemente herido en el camino como resultado de estos errores. 2. El cuerpo humano tiene una capacidad física limitada para tolerar las fuerzas de choque.

La seguridad vial es una responsabilidad compartida entre todos.
Todas las partes del sistema deben fortalecerse en combinación para multiplicar los efectos protectores y si una parte falla, las otras aún protegerán a las personas.

(c) 1. Gestión de la seguridad vial: mejorar la comunicación, la cooperación y la colaboración entre todas las partes interesadas en la gestión de la seguridad vial; cooperación entre administraciones y sociedad civil; enfoque integral del sistema de tráfico; mejoras legales, y mejoras en los sistemas de aplicación de la ley y de gestión de las sanciones., según la situación de cada país; adopción de una ley general de seguridad vial, en países donde no existía; creación de un organismo nacional de seguridad vial, en países donde no existía; desarrollo de un Observatorio Nacional de Seguridad Vial, en países donde no existía; mejoras de los procedimientos para la obtención de licencias de conducir; creación de una licencia de conducción nacional única, en países donde no existía; introducción del control automático de la velocidad, en países donde no existía; mejoras en la recolección y análisis de los datos de accidentes.

Usuarios seguros: involucrar a todos los ciudadanos en la mejora de la seguridad vial; énfasis en la formación y educación vial. Campañas de información y concienciación; seguridad vial en el lugar de trabajo y en los desplazamientos al trabajo; proteger a todos los usuarios de la carretera, en especial a los más vulnerables; reducción de la accidentalidad de ciclistas y peatones, particularmente; introducción de legislación que incluya los dispositivos de bloqueo por alcohol.
Infraestructura segura: reducción de la accidentalidad y siniestralidad en las carreteras convencionales; mejoras en la señalización y diseño de carreteras; en general, mejoras en las infraestructuras, según la situación de cada país.
Vehículos seguros: nuevas tecnologías: ADAS, vehículo conectado, ITS, etc.; anticiparse para poner nuevas tecnologías al servicio de la seguridad vial.
Asistencia post-accidente: atención integral a las víctimas de accidentes; mejora de los tiempos de respuesta y de la calidad de la atención a las víctimas, según la situación de cada país; en general, reducir las consecuencias de los accidentes.

Las estrategias aportadas por todos los Organismos implicados en la Estrategia de Seguridad Vial 2021-2030 están dirigidas a hacer frente a los mismos (a) desafíos.

(a) 1. Involucrar realmente a toda la ciudadanía en la seguridad vial, ya que en la Estrategia anterior (2011-2020) no se consiguió. 2. Atención a las necesidades de movilidad de la población envejecida, mayoritaria en el ámbito europeo.

La integración segura en el tráfico de las nuevas formas de movilidad urbana (patinetes, bicicletas eléctricas, etc.) y activa (peatones y ciclistas).
Atención especial a la seguridad de los usuarios vulnerables de la vía. Seguir como hasta ahora e incluir a la población de edad avanzada y los nuevos modos de movilidad.
Integración de avances tecnológicos relacionados con la seguridad vial en las infraestructuras y sistemas de vigilancia y gestión de tráfico (conectividad) y los vehículos (ADAS, conectividad, ITS, conducción automática, propulsión eléctrica, etc.).
Mejora de otros aspectos ya incluidos en la Estrategia 2011-2020:

Seguridad vial en las carreteras convencionales.
Excesos de velocidad.
Accidentes provocados por distracciones, especialmente por dispositivos electrónicos.
Conducción bajo los efectos del alcohol y otras drogas, especialmente en el caso de infractores reincidentes.

Factores de Riesgo en Accidentes de Tráfico: Perspectiva del Profesor de Autoescuela

Según la OMS, anualmente se producen aproximadamente 1,35 millones de muertes a nivel mundial por accidente de tráfico, lo que supone unas pérdidas económicas importantes, alcanzando en casi todos los países el 3% del Producto Interior Bruto (PIB). Los factores de riesgo que influyen sobre la producción de los accidentes de tráfico son:

Errores humanos.
Velocidad.
Consumo de alcohol y drogas.
No utilización de los sistemas y dispositivos de seguridad: cinturón de seguridad, casco de protección, sistemas de sujeción para niños.
Distracciones.
Infraestructuras en mal estado.
Vehículos inseguros.
Incumplimiento de las normas de tráfico.

En España, los accidentes se han reducido notablemente desde la implantación del permiso por puntos entre otras medidas. Los costes derivados de los accidentes de tráfico se pueden dividir en:

Costes por víctima: médicos, pérdida de capacidad productiva y otros costes.
Costes humanos: pérdida de esperanza de vida, sufrimiento físico y moral de la víctima.
Costes por accidente: daños materiales, costes administrativos y otros costes.

Se considera accidente de tráfico a todo aquel suceso fortuito, incontrolable, fruto del destino o de la casualidad y, en consecuencia, inevitable. Sin embargo, existen estudios que consideran que los accidentes no son fruto del azar, sino que se pueden evitar y minimizar sus consecuencias. Los incidentes son los conflictos o cuasi-accidentes que se producen durante la conducción debido a una actuación o situación de inseguridad que no da lugar a ningún daño o lesión pero que podría haberlo hecho.

Existe una relación directa entre los términos de accidente e incidente que se establece mediante la Pirámide de Hyden. Se considera factor de riesgo a todo elemento, fenómeno, condición, circunstancia o acción humana que aumente las probabilidades de que se produzca un accidente. Son:

Factor humano: el que más accidentes provoca.
Factor vehículo.
Factor vía y entorno.

Los accidentes debidos a un fallo o el mal estado del vehículo muchas veces tienen que ver con el factor humano (falta de mantenimiento, falta de control de la detección de fallos, etc.). Muchos de los accidentes provocados por el mal estado de los elementos del vehículo se podrían haber evitado llevando a cabo un mantenimiento adecuado, que según diversas encuestas en España está muy por debajo de la media europea.

Las características de las vías también influyen en la probabilidad de que se produzca un accidente. Los accidentes de tráfico que se producen al ir o volver del trabajo (in itinere) o durante el mismo (in misión), son accidentes laborales viales. Para reducir la accidentalidad se desarrollan políticas en materia de seguridad vial. Hasta el año 2020 estuvo vigente la Estrategia de Seguridad Vial 2011-2020 y actualmente la vigente es la Estrategia de Seguridad Vial 2021-2030. Los aspectos clave sobre los que se hace hincapié en la Estrategia de Seguridad Vial 2021-2030 son: