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FP Movilidad Segura y Sostenible Online: Estrategias y Fases de Implementación

Planes de seguridad vial

Pese a lo que puede parecer, los planes estratégicos y de movilidad, no son exclusivos de los organismos gubernamentales. En realidad, son una herramienta capaz de ayudar a reducir la siniestralidad en cualquier entidad. Cada vez son más las empresas que implementan un Plan de Movilidad y Seguridad Vial dentro de las políticas de prevención de riesgos laborales, con el fin de garantizar la seguridad de sus trabajadores. Los planes estratégicos de seguridad vial se elaboran con el fin de reducir la tasa de mortalidad y accidentalidad relacionados con la seguridad vial, mientras que los de movilidad buscan generar formas de desplazamiento e itinerarios accesibles, seguros y atractivos. Ambos planes se podrían definir como un conjunto de estrategias y mecanismos estipulados para integrar la seguridad vial como una cuestión inherente al ser humano y reducir así la accidentalidad. Contienen acciones, mecanismos y medidas para proteger a la sociedad en general.

Tal como recoge el Observatorio Nacional de Seguridad Vial en su informe “Estrategias de seguridad vial y movilidad del próximo decenio” publicado por la Dirección General de Tráfico, la realización y puesta en marcha de planes y estrategias donde se definen las líneas de actuación y compromisos es la mejor forma de trabajar en conjunto.

Las estrategias aportadas por todos los Organismos implicados en la Estrategia de Seguridad Vial 2021-2030 están dirigidas a hacer frente a los mismos desafíos:

Involucrar realmente a toda la ciudadanía en la seguridad vial, ya que en la Estrategia anterior (2011-2020) no se consiguió.
Atención a las necesidades de movilidad de la población envejecida, mayoritaria en el ámbito europeo.
La integración segura en el tráfico de las nuevas formas de movilidad urbana (patinetes, bicicletas eléctricas, etc.) y activa (peatones y ciclistas).
Atención especial a la seguridad de los usuarios vulnerables de la vía. Seguir como hasta ahora e incluir a la población de edad avanzada y los nuevos modos de movilidad.
Integración de avances tecnológicos relacionados con la seguridad vial en las infraestructuras y sistemas de vigilancia y gestión de tráfico (conectividad) y los vehículos (ADAS, conectividad, ITS, conducción automática, propulsión eléctrica, etc.).
Mejora de otros aspectos ya incluidos en la Estrategia 2011-2020: – Seguridad vial en las carreteras convencionales. – Excesos de velocidad. – Accidentes provocados por distracciones, especialmente por dispositivos electrónicos. – Conducción bajo los efectos del alcohol y otras drogas, especialmente en el caso de infractores reincidentes.

Fases de elaboración de un plan de seguridad vial

Los planes de seguridad vial son herramientas que permiten diseñar la manera de cambiar o mejorar la seguridad vial.

Se puede implementar en organizaciones tanto privadas como públicas, ciudades, regiones, naciones e incluso de manera global. Deben ajustarse a cada organización donde se pretenda implementar, analizando las características de cada una de ellas. Se ha de tener presente que lo que funcionó en una situación y un momento determinado, puede ser que no funcione en otro.

Pero salvando las diferencias, se podría considerar que todos los planes de seguridad vial tienen que incluir 5 elementos comunes: Un plan adecuado de seguridad vial nos va a permitir conocer la situación real, alcanzar las metas propuestas y obtener los cambios deseados. La DGT a través del Observatorio Nacional de Seguridad Vial ha editado una “guía metodológica para elaborar un plan de seguridad vial para empresas”, extrapolable a cualquier organización, en la que se recogen la fase preliminar y las 5 etapas en las que se desarrollan esos 5 elementos, más una fase preliminar para la elaboración de un plan de seguridad vial.

FASE PRELIMINAR

Implicar a la dirección y a los agentes participantes.
Asignar a los responsables del plan.
Movilizar a la organización.

ETAPA 1. DIAGNÓSTICO

Identificar las principales características.
Analizar la movilidad.
Analizar los accidentes.
Analizar las condiciones reales de la conducción.
Analizar la gestión de los desplazamientos.

ETAPA 2. EVALUACIÓN DE RIESGOS

Asignar el nivel de exposición al riesgo.
Seleccionar colectivos prioritarios.

ETAPA 3. ELABORACIÓN DEL PLAN

Definir los objetivos a alcanzar.
Seleccionar acciones.
Buscar sinergias y apoyos.

ETAPA 4. IMPLANTACIÓN DEL PLAN

Planificar las actividades a desarrollar.
Comunicación inicial a la organización.
Adecuación, en su caso, de instalaciones y equipos.
Establecimiento de procesos para la gestión.
Adaptación de la organización a los cambios.

ETAPA 5. SEGUIMIENTO Y EVALUACIÓN

Definir los indicadores del plan de seguridad vial.
Obtener el valor de los indicadores.
Analizar y evaluar el resultado de los indicadores.
En su caso, establecer medidas correctivas o revisar las ya adoptadas.

Se trata de un elemento fundamental a la hora de asegurar el éxito de un plan de seguridad vial. No es una tarea sencilla, dado que está sujeta a numerosos elementos externos como las políticas de empresa, situación económica, etc. y elementos subjetivos, como pueden ser el estilo de dirección, la actitud ante la seguridad vial, etc.

Una vez concienciados de la problemática de la seguridad vial en el trabajo diario, el siguiente paso es la asignación de un responsable o grupo de trabajo responsable de la elaboración y la implementación del plan en la empresa/entidad.

ETAPA 1. DIAGNÓSTICO

Identificar las principales características.
Analizar la movilidad.
Analizar los accidentes.
Analizar las condiciones reales de la conducción.
Analizar la gestión de los desplazamientos.

Esta fase comprende el análisis de diferentes aspectos y puede realizarse con la ayuda de herramientas de autodiagnóstico. A la hora de acometer la elaboración de un Plan de seguridad vial, se debe hacer una reflexión general sobre la organización (tamaño, sector, etc.) y sus actividades y sobre cómo está afectada por los riesgos relacionados con la conducción.

ETAPA 2. EVALUACIÓN DE RIESGOS

Asignar el nivel de exposición al riesgo.
Seleccionar colectivos prioritarios.

También deberían considerarse grupos especialmente sensibles, como los conductores jóvenes o noveles y quienes conducen largas distancias. Se trata de medir el riesgo de accidente de tráfico producido por las propias conductas, hábitos y condiciones reales de conducción.

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